Una recopilación documental objetiva y transparente con elementos que permiten analizar el ‘caso BPA’
El Grupo Cierco edita dos mil volúmenes que recopilan una treintena de informes sobre la actuación del grupo bancario intervenido · Se harán llegar a instituciones públicas y privadas y entidades que tienen incidencia en la opinión pública.
ANDORRA LA VELLA, 7 DE MARZO DEL 2016.- Un año después de la intervención de Banca Privada de Andorra (BPA) -y también de Banco Madrid con el que, y entre otros, se configuraba el Grupo BPA- aún quedan muchas incógnitas para resolver. No sólo, que también, queda saber qué solución final tendrá el caso. Es necesario poder averiguar las verdaderas razones que llevaron el FinCEN a dictar el ‘Notice’ del 10 de marzo de 2015. Es en este marco que los accionistas mayoritarios de BPA, el Grupo Cierco, han decidido editar una recopilación de documentos que, al menos en parte, acreditan que la entidad bancaria intervenida actuaba bajo el estricto cumplimiento de la normativa. Y que, si había algo que se separaba de la legalidad, era el propio banco quien actuaba de forma decidida y con contundencia.
El Grupo Cierco ha editado dos mil volúmenes de esta recopilación, mil de los cuales irán acompañados de un librito con la traducción al castellano y al inglés del texto introductorio. No se trata de una recopilación exhaustiva ni definitiva. Pero vista la opacidad con que se está actuando, principalmente desde las instituciones encargadas, de una manera u otra, de la gestión de la crisis, los accionistas mayoritarios de BPA ponen al alcance de la opinión pública aquellos documentos de que dispone o ha podido conseguir. Es bien sabido que las acciones judiciales emprendidas ante la Justicia del Principado, muchas de ellas tendientes a tener acceso a determinada información, siempre han sido denegadas, muy a menudo con argumentaciones jurídicas muy débiles e incluso injustificadas.
El volumen incluye una treintena de documentos, algunos de los cuales conocidos incluso por la opinión pública -como el ‘Notice’ del 10 de marzo de 2015 o la reciente nota que lo dejaba sin efecto-. También se incluyen las auditorías que avalaron siempre la actuación de BPA e informes que la entidad pidió específicamente sobre alguno de sus clientes (Rafael Pallardó, Viktor Kanaykin) para reforzar la diligencia ordinaria que los bancos llevan a cabo y asegurar -se, de este modo, de la licitud de los capitales que eventualmente la entidad se disponía a recibir.
En un ejercicio de transparencia y con el intento de aportar los elementos necesarios que hagan ver que en ningún caso BPA era lo que algunos pretenden hacer ver que era, convencidos de que el banco aplicaba las medidas de control adecuadas incluso más allá de los mínimos exigidos por la ley, los accionistas mayoritarios harán llegar la recopilación documental a las principales instituciones del país. Desde el Gobierno al Consejo General pasando por los organismos de supervisión bancaria u otras entidades de incidencia en la toma de decisiones políticas ejecutivas y legislativas y en la opinión pública. La documentación también se hará llegar a personas y organismos extranjeros que por motivos diversos puedan tener relación con el asunto.
La familia Cierco, con la misma rigurosidad y constancia que trabaja desde hace décadas, continuará ahora trabajando por la defensa de sus intereses, manteniendo y emprendiendo tantas acciones -especialmente legales- como crea oportunas velando, también, por el restablecimiento de su reputación y buen nombre que algunos, supuestamente, han querido dañar de forma injusta e injustificada. En la actualidad se mantienen abiertos procesos judiciales en Andorra y en Estados Unidos. Se estudian acciones en España y otras jurisdicciones donde puedan resultar lesionados los derechos de la familia en tanto qué accionista mayoritaria de BPA y se tiene la firme decisión de acudir a los tribunales europeos para que sean éstos los que diriman las vulneraciones eventuales de que haya sido víctima. Sin olvidar que antes de un contencioso judicial siempre se ha dejado abierta la puerta a la solución negociada. Una vía que se mantiene desde la familia Cierco sobre la mesa pero que siempre ha sido menospreciada por la administración andorrana.
Ahora que con la retirada del ‘Notice’ por parte del FinCEN parece que la plaza financiera andorrana deja de estar bajo los efectos de la lupa americana, procede, a juicio de los accionistas mayoritarios de BPA, dar un paso más, por parte de todas las personas y organizaciones inmersas en la crisis hacer un ejercicio de claridad y transparencia para aclarar de una vez por todas qué es lo que realmente ocurrió. Que llevó el FinCEN a dictar la nota del 10 de marzo y como se ha gestionado con posterioridad toda la crisis. Sólo así se podrá evitar la repetición de un hecho que ha causado irreparables daños a una entidad en concreto pero que todavía hay que ver qué impacto real tiene y tendrá en el conjunto de la plaza financiera y la economía andorrana.